Catedral de Santa María del Fiore

Antes de que la visites, seguramente la has visto mil veces. La famosísima Catedral de Santa María del Fiore, también conocida como la Catedral de Florencia o simplemente “il Duomo” (por su icónica cúpula), es una impresionante obra maestra de la arquitectura renacentista italiana. Esta catedral es la sede episcopal de la arquidiócesis de Florencia y es uno de los edificios más grandes de toda la cristiandad. Su nombre se refiere al lirio, símbolo de Florencia, también del antiguo nombre Fiorenza.

La Catedral de Santa María del Fiore es conocida por su impresionante fachada de mármol blanco, verde y rosa, decorada con intrincados detalles y esculturas que cuentan historias bíblicas y religiosas. Diseñada por Filippo Brunelleschi, la construcción de la cúpula fue un desafío técnico para su época; la iglesia tardó 140 años en completarse. Si tienes la energía y la disposición para subir los 463 escalones hasta la cima, serás recompensado con vistas panorámicas impresionantes de la ciudad y sus alrededores.

A medida que te acercas a la cima, podrás apreciar de cerca los frescos del Juicio Final que adornan el interior de la cúpula, una obra maestra del pintor Giorgio Vasari. Esta impresionante estructura tiene una altura interior de 100 metros y un diámetro exterior de 45 metros. En total son más de 4 millones de ladrillos acomodados internamente con la técnica “espina de ladrillo/pez” para que la cúpula sea autoportante.

La cúpula fue un prodigio de la arquitectura del momento, y hasta el día de hoy sigue siendo admirable. Con la planta ampliada por Francesco Talenti, la nueva iglesia se construyó sobre otra pequeña, Santa Reparata, y se hicieron una serie de concursos para construir cada parte del complejo con el paso de los siglos (el baptisterio, el campanario, la cúpula, etc.). El propio Brunelleschi ganó la competencia por el Duomo con un huevo como ejemplo de la forma que utilizaría (tomando también como ejemplo el Panteón de Roma).

El interior de la catedral puede ser menos llamativo que otras grandes iglesias por la simpleza del diseño renacentista, pero igual admirarás su amplio espacio, sus enormes columnas y sus impresionantes vitrales que bañan el ambiente con luz y colores vibrantes. El altar mayor es una obra maestra de la escultura y la pintura, con relieves de mármol y frescos que representan escenas cristianas. También se pueden apreciar pinturas y esculturas de reconocidos artistas renacentistas, como Donatello y Miguel Ángel, y los motivos geométricos del pavimento que son una exquisitez.

Además de su impresionante arquitectura y obras de arte, la Catedral de Santa María del Fiore también tiene una rica historia. Desde el crecimiento de Florencia en la Baja Edad Media hasta su protagonismo internacional en el Renacimiento, la historia de vida del edificio va de la mano con el poderío de los comerciantes florentinos.

Aunque no la visites por dentro ni subas a la cúpula, será de paso obligado durante tus recorridos por Florencia, pues está en el centro del casco histórico y todas las calles principales llevan a la plaza donde te espera. Te recomendamos que te saques fotos desde los distintos ángulos del complejo religioso a una buena distancia, ¡es tan gigante que sino no cabe en la imagen!